Llegaron nuestros hombres...
Luego de haber estado con mi novia, mi preñadita nuera y mi mujer, mi noviecita me dijo que estaba en espera de un bebé y todo mi mundo tomó un giro de alegría. Cuando íbamos a conversar del tema aparte, sentimos el ruido del motor del auto de mi hijastro(mi marido y todo lo demás). Hemos traído el negocio que cambiará nuestras vidas. Estaba eufórico y su papá ni se diga. Iban a ser contactos de una compañía de producción de videos porno. Tenemos que enviar unos demos y ellos estaban seguros que con la experiencia nuestra íbamos a dar un palo. El esposo de mi mujer dijo que cada uno llevaría una buena tajada de dinero y obviamente seriamos los protagonistas, aunque tendríamos que traer algunas personas bien dotadas y que aspiren ser profesionales en la industria porno. Se notaba que habían maquinado algo. Mi nuera se expresó m*****a y se retiró de la conversación. Mi mujer sonrió y dijo que ella estaba dispuesta,siempre y cuando se evaluaran bien cada uno de los participantes. Mi noviecita dijo un NO,rotundo. No quiero desanimarlos chicos, creo que antes de haber hecho un compromiso, debieron consultar con nosotros ,dije Estuvimos hablando del tema y el esposo de mi mujer quiso que tuviéramos sexo para quitar el stress. Me dijo en tono autoritario que les mamara la pinga a ambos. Mi mujer se encabronó porque no se lo pidieron a ella y me dijo que no me dejara manipular así. Claro que ella sabe que esas vergas me vuelven loca. Mi hijastro, se me acercó y me plantó un beso, metiendo su lengua hasta mi garganta y empujándome por los hombros me obligó a arrodillarme frente a su pinga. Me ordenó que le aflojara el pantalón y a esta altura yo estaba dominada y extremadamente bellaca. Mi mujer sonrió sarcásticamente y me dijo, ay Sharon, porqué pensé que sería diferente. Es mi culpa por haberte presentado a mi hijo y se enchularan mutuamente . Ella se levantó la falda y se le ofreció a su esposo, pero él no quitaba la vista de mi hijastro y de mí. Mi mujer prendió un cigarrillo y resignada, empezó a pajearse. Al yo soltar el pantalón de mi marido, su pinga quedó justamente en mis labios, bésala me exigió él. Yo hice como me pidió y él aprovechó mi cercanía y me propinó una sonora bofetada y metiendo su mástil de carne, me chingó la boca. Su papá ya se había exitado bastante y extrajo su enorme bicho y se lo acarició hasta que se le puso durísimo. Yo por joder, mientras me tragaba literalmente el poste jugoso de su hijo, lo miraba a él y él se agitaba más, deseándome. Yo estaba seguro de que mi macho explotaría pronto así que intensifiqué la mamada y mi hijastro se hallaba indefenso y vulnerable. Mirándolo con cara de súplica, le pedí que me diera su leche. Mi mujer se metió un par de dedos en su chocha húmeda que hacía un sonido antojadizo. Era el momento perfecto para que su esposo la cogiera pero el ni la miró. Yo juro que si no fuera que mi hijastro me llenaría la cara de dedos, lo soltaba a él y me la hubiese chingado. El aroma a chocha húmeda, era dulce e inundó la sala de estar. Gruñí,para ganarme su atención y ella me miró. Yo con ojos golosos y llenos de lujuria y mirándola, ataqué con mayor furia la erguida polla de su hijo y entonces mi mujer, aceleró entre y sale y gritando mi nombre se encorvó hacia el frente comenzó a mear y más duro le sometió a la auto-gratificación llegando al clímax, produciéndose un orgasmo bien cabrón. Yo no podía ser tan pendeja de haber dejado aquel polvo, me decía para mí. En ese momento, yo era la Reina y apreté los labios y mi pobre macho explotó en mi boca, obligándome a tragar todo ese semen saladito como sudor de hombre sepia trabajando bajo el sol,jajaja. Puuutaaa,aaaaajjjj, me la sacaste, me cago en tu puta madre,decía. Lo jodí con la boquita nada más. Me restregué su macana de carne por toda la cara y le dí una par de chupadas y le extraje hasta la última gota de leche. Uuummm, Uuummm, chupaba y lo dejé tirado en el sofá y mirando a su papá, sabiendo que se moría por una de mis mamadas, llamé a mi mujer y la acosté debajo de mí y le espeté mi bicho. Entonces ,hice señas a su marido para que se parase frente a mi, con las piernas abiertas, con tal de que nuestra mujer observarse de abajo hacia arriba como su esposo sucumbiría como manso corderito. Él se allanó a mi petición e hizo todo al piéde la letra. Pobre pendejo que piensa que el dinero y el estatus social eran más importantes que su propia esposa, ahora estaba a mi merced. Mientras tanto, me chingaba a esa que lo llevaba a las fiestas y lo mostraba, como burro de ferias a sus amigos y amigas. Pude ver en su rostro, la lujuria y cómo fue él quien le lavó el cerebro a su hijo con la idea de los videos porno. En ese momento, mi mujer comenzó a gemir, pero nunca pronunció el nombre de su esposo. Yo me saqué la pinga de mi boca y le comencé a hacer un trabajo manual. Él, sabiendo que la explosión estaba muy cerca me suplicaba que me echara su verga en la boca nuevamente. Yo le empuñé más firme su sabrosa salchichota y lo seguí pajeándo. Mi mujer haciendo un arco con su cuerpo, se chingaba mi pinga hasta que yo no pudiendo resistir me vine, soltando toda mi leche en su monte de placer. Su marido, la vió gozar,disfrutar y dejarse llevar por la mano a donde me salió de mis cojones y tuvo que conformarse con una puñeta. Su voz, rompió el armonioso sonidode los suaves gemidos y jadeos de su extenuada esposa y los míos. CARAJOOOOO, SHARON, ERES UNA CABRONA, PUTA, TOMA MI LECHE, decía el muy pendejo y sus chorros de caliente leche cayeron sobre la alfombra, justo donde se hallaba mi mujer provocando que ella saltara para que la leche de su esposo la rozara. Mi mujer sonrió y gateando llegó hasta la mesa de centro y alcanzó los cigarrillos. Viendo al incrédulo esposo con la verga toda flácida prendió mi cigarrillo y el de ella y se echó varias carcajadas. Sabes qué, Sharon? Nosotras haremos el "casting"para los videos y estos pendejos nos servirán de relleno.
Trato hecho, brindemos dijo,levantándose buscó el vino y tres copas. Brindo por el éxito del proyecto, por nuestros machos y por todos los hombres y hembritas que nos comeremos. Salud dijimos alzando las copas.
Trato hecho, brindemos dijo,levantándose buscó el vino y tres copas. Brindo por el éxito del proyecto, por nuestros machos y por todos los hombres y hembritas que nos comeremos. Salud dijimos alzando las copas.
5 years ago